Las casas de los espíritus o san phra phum son casitas (o templos) en miniatura, pintadas de colores vivos y colocadas sobre una columna o un estrado.
En algunos países del sudeste asiático (Tailandia, Camboya, Birmania y Laos), la mayoría de las casas y negocios (incluso grandes hoteles) y hasta algunos edificios oficiales tienen una casa de los espíritus colocada en un lugar muy visible, a menudo en una esquina de la parte frontal de la propiedad.
Estas casas de los espíritus están destinadas a proporcionar un refugio a los espíritus que habitaban en el lugar antes de que la vivienda o el edificio fueran construidos. Además de proporcionarles este «alojamiento», los tailandeses, camboyanos, etc. presentan ofrendas a esos espíritus: comida y bebida, flores, velas, etc., ofrendas que depositan cada día en la casa, que a veces incluye un altar para este fin. ¡De no ser apaciguados de ese modo, los espíritus podrían causar problemas a los humanos que han invadido su hábitat!
Las casas de los espíritus a menudo incluyen imágenes de personas o animales.
Es curioso que en pleno siglo XXI estas creencias permanezcan tan vivas.