Tavira es la primera de las ciudades que, como cuentas de un rosario, jalonan la costa del Algarve (Portugal) de Este a Oeste.
Tiene Tavira, al igual que sus hermanas Olhao, Portimao, Lagos… y, por supuesto, Faro, capital del Algarve y algo mayor de tamaño, un encanto especial. Eso es lo que te hace pasear por sus calles una y otra vez, esperando encontrar algún detalle, algo nuevo en lo que no te habías fijado en tu última visita. Sus tejados con una inclinación imposible, sus fachadas adornadas con azulejos o molduras de tonos grises, sus balcones…
El que prueba, repite. Sin lugar a dudas, el Algarve engancha.