El Ojo Azul, conocido en inglés como Blue Eye y en albanés como Syri i Kaltër, es un manantial de un color increíblemente azul que puede verse en el condado de Vlorë (sur de Albania).
Si te cuentan que vas a ver un manantial, tus expectativas no serán muy altas. Vamos, que seguro que no piensas que el Ojo Azul pueda ser algo especialmente sorprendente. Luego llegas allí y… bueno, será mejor que lo veas por ti mismo. Te garantizo que los colores de la fotografía que ves abajo no han sido alterados con ningún programa de tratamiento de imágenes.
Dicen que el color azul del agua se debe a que ésta brota desde una profundidad de más de cincuenta metros. Los buzos han descendido hasta los cincuenta metros, pero no han podido llegar más allá; y el agujero kárstico continúa, así que se desconoce su profundidad. O al menos eso es lo que se cuenta. Aunque quizá sea sólo una leyenda destinada a promocionar el turismo.
El Ojo Azul es la fuente del río Bistricë, de 25 km de longitud, que desemboca en el Mar Jónico, al sur de Sarandë. El agua no solo surge de las profundidades de la tierra a través del ojo propiamente dicho (el gran agujero), sino también a través de una multitud de invisibles agujeros pequeños, cuya existencia en el lecho del río sólo se puede intuir por el ligero borboteo de las aguas.
Si piensas ir a contemplar el Ojo Azul, procura no hacerlo en pleno verano, porque probablemente encontrarás el lugar abarrotado de turistas. Incluso podrías ver algunos bañándose, a pesar de la baja temperatura de las aguas y de que el baño está prohibido. Un día soleado de primavera sería el momento más indicado para la visita.
El manantial, por cierto, está situado en un entorno natural paradisíaco.
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