Suzhou es la más famosa de las muchas ciudades de agua o pueblos de agua (Water Towns) que hay en la zona, así que, si tienes la suerte de aterrizar por allí, no te limites a visitar alguno de sus jardines, como se hace en los viajes organizados por las agencias: es imprescindible que realices un recorrido a pie o en barca por los canales de la ciudad vieja.
Mi recomendación: tómate el tiempo necesario para recorrer despacio la calle peatonal Pingjiang, una de las más famosas de toda China, que discurre al lado de un canal en el cuadrante nordesde del casco viejo amurallado. Cualquier hora del día es buena para realizar el recorrido. En tu paseo a lo largo de la calle encontrarás rincones encantadores, pequeños comercios, lugares para comer y beber… y bastantes turistas, o eso me temo.
Los jardines de Suzhou
La calle Pingjiang termina, por el norte, cerca del jardín del Administrador Humilde. Si iniciaste el recorrido por su extremo sur, puedes aprovechar para visitarlo ahora. Sería un sacrilegio irse de Suzhou sin haber contemplado al menos uno de sus famosos jardines.
Los jardines clásicos chinos tienen siempre agua, pabellones y rocas. Además de árboles y plantas, por supuesto.