Las Lagunas de Ruidera son un extenso humedal situado en Castilla La Mancha, entre las provincias de Ciudad Real y Albacete.
Se trata de una serie de lagos formados a lo largo de los siglos por la acumulación del carbonato cálcico que arrastran las aguas del río Guadiana Viejo o Pinilla. Este material ha ido formando barreras que han hecho que las aguas se embalsen y formen las lagunas. Las lagunas están a distintos niveles, y las aguas van fluyendo entre ellas por arroyos y pequeñas cascadas.
El fenómeno que ha dado lugar a las Lagunas de Ruidera es similar al que ha dado lugar a los lagos del Parque Nacional de Plitvice, en Croacia. De hecho, a veces se compara ambos lugares. Pero el humedal español está en una zona básicamente llana, más poblada y de clima más cálido y seco. Así que, habiendo visto ambos lugares, aunque su origen sea el mismo yo no los compararía: cada uno tiene su propio atractivo.
Las Lagunas de Ruidera son un espacio natural protegido. Pueden visitarse fácilmente, porque hay una carretera que las bordea. Aguas abajo, terminan en el embalse de Peñarroya: puedes verlo en el mapa, arriba a la izquierda (porque las aguas fluyen de sureste a noroeste).
Dentro de los límites del Parque Natural de las Lagunas de Ruidera tendrás opción de visitar el castillo de Peñarroya, las ruinas del castillo de Rochafrida y la cueva de Montesinos, que aparece en el Quijote. Y a solo hora y media de camino tienes el encantador paraje del nacimiento del río Mundo.